En el plano político, esta será la primera vez que el gobernador Francisco Paco Pérez dé un golpe de reja para abrir los actos centrales de la Vendimia, aunque desde hace tiempo viene ensayando al participar en bendiciones de varias fiestas departamentales.
Como siempre, la parte litúrgica estará a cargo del obispo de Mendoza, monseñor José María Arancibia, y para el golpe de reja así como para el tradicional brindis con el vino nuevo se sumará la Reina Nacional de la Vendimia 2011, la Godoicruceña Gabriela Koltes.
Respecto a lo artístico, se promete una fuerte impronta coral. Es por ello que la puesta que se verá en el prado ubicado al Este de la Rotonda de la Calesita se llama La voz coral de las cosechas. Tiene libreto de la periodista Gloria Bratschi y dirección general de Alejandro Scarpetta. El acto rendirá homenaje al trabajo y la producción de todos los mendocinos.
Se estima que en escena habrá un coro de 250 voces, quienes con arreglos corales e instrumentales de Ricardo Mansilla interpretarán obras tradicionales del cancionero popular mendocino y las de la ceremonia religiosa, con un tratamiento sonoro que oscila entre lo tradicional y lo contemporáneo.
Una orquesta sinfónica de 22 integrantes y un grupo instrumental folclórico liderado por Carlos Méndez acompañarán a la masa coral. Participarán los coros de Amicana, Nuevas Voces, Cantapueblo, el de la Ciudad de Mendoza, la Universidad del Aconcagua, de Jóvenes de la UNCuyo y del Club Mendoza de Regatas. Se sumarán los Niños Cantores de Mendoza, el solista Javier Rodríguez y el dúo Cacace- Aliaga.
De nuevo en el ParqueEn lo litúrgico, se seguirá lo que se viene haciendo desde 1939. El obispo bendecirá los frutos, luego se realizarán los tres golpes de reja a los que seguirá el ingreso al predio de la imagen de la Virgen de la Carrodilla. Finalmente, vendrá el brindis con el vino nuevo, un momento cargado de gran simbolismo y emoción.
Además de recuperar el Baile de las Reinas como una novedad, también la Bendición vuelve al escenario que dejó de ocupar en 2006. Ese año se decidió que sería itinerante, por lo cual cada edición se realizó en diferentes puntos de la provincia.
Sin embargo, la gestión de Pérez apostó a la recuperación de la tradición, por lo cual se estipuló que otra vez ocupara el Prado Gaucho, que cuenta con una capacidad para unas 8.000 personas.
Costumbre recuperadaUna vez terminada la Bendición de los Frutos, esta noche a partir de las 22.30 en el mismo Prado Gaucho del parque General San Martín se realizará el Baile de las Reinas. La idea es que primero las soberanas bailen con las autoridades y luego se sume el público, al ritmo de música de corte netamente cuyano y tanguero.
La primera edición se realizó en 1941 en el edificio de Playas Serranas y desde entonces era el momento en que el gran público podía conocer de cerca a las soberanas departamentales, luego se fue haciendo un acto cerrado a las autoridades ya que en esa misma oportunidad se votaba a la futura Reina Nacional.
La intención del Ministerio de Cultural es recuperar esta perdida costumbre para que se repita de aquí en más.
En el escenario estarán la Reina y Virreina Nacional 2011, Gabriela Koltes y Florencia Morralla, respectivamente, y las soberanas departamentales, quienes acompañadas por el gobernador, el vicegobernador y los intendentes bailarán un vals cuyano.
Al finalizar, se invitará al público a sumarse a la danza. Los encargados de ambientar la velada serán los músicos de la Orquesta Carlos Pozobón, que interpretarán diversos ritmos: vals, música folclórica cuyana y tango, entre otros. La dirección artística estará a cargo de Enzo De Lucca.
Imperdible- La Bendición de los Frutos arrancará a las 21 en el Prado Gaucho del parque General San Martín, ubicado al Este de la Rotonda de la Calesita.
– Se espera la presencia de unos 8.000 espectadores y en escena habrá 250 cantantes, quienes integran diversos coros de Mendoza.
– Posteriormente, desde las 22.30 se realizará el Baile de las Reinas. Comenzará con un vals a cargo de las soberanas vendimiales y las autoridades, para que luego se sume el público presente al ritmo de música cuyana y tanguera. Diario Uno