Por décimo segundo año consecutivo, la cultura vitivinícola del Valle Sur del Atuel, con sus mejores exponentes, fue protagonista de una jornada cargada de aromas, colores y sabores con la realización de la edición 2007 de Evinsur. La convocatoria que se viene renovando cada año desde 1996, atrajo la atención de alvearenses y foráneos que se dieron cita en el Predio Ferial, para compartir y saborear los vinos de la zona. Este encuentro, por su estructura admite la presencia de familias enteras en la degustación dirigida, como así también en la tradicional noche del vino, que permite saborear y disfrutar de una variada gama de vinos de cosechas anteriores. Culminó con una cena ágape que estuvo matizada con un singular espectáculo musical a cargo del saxofonista Jorge Ahumada en primera instancia y en el cierre del evento las voces de Rubén Báez y José Ochoa. Durante la primera jornada, en el salón Roberto Fernández, los asistentes tuvieron la oportunidad de degustar y evaluar junto a un nutrido grupo de profesionales, las 10 muestras seleccionadas por el Centro de Enólogos, en las cuales quedó reflejada nuevamente una cosecha de excelencia y esmerada elaboración. Lo productos cautivaron los sentidos de las casi 400 personas que se dieron cita, entre las cuales estuvo presente el intendente departamental Juan Carlos de Paolo y la ministra de Economía, Laura Montero. La funcionaria destacó el esfuerzo realizado por toda la cadena vitivinícola desde la mejora sustancial de los viñedos, la incorporación de tecnología, además del gran sacrificio y dedicación desde los productores al técnico con procesos sumamente cuidadosos, como los factores preponderantes que llevaron a los vinos de esta zona a competir en el mercado internacional y sobresalir entre los mejores del mundo indicó. Para Claudia Quini, del INV, especialista y jurado internacional, es destacable el avance cualitativo de la producción local, se puede observar un salto cualitativo importante sustentado en el perfeccionamiento de todos los eslabones que intervienen en la elaboración del vino, desde el viñedo a la copa. La evaluación de vinos del Valle Sur del Atuel contó en esta edición con 10 muestras, de un total de 60 presentadas por unas 25 bodegas. Los exponentes seleccionados en esta oportunidad para ser degustados fueron: 3 blancos (cereza moscatel, chenin y chardonay) con colores atractivos, aromas típicamente varietales y buena estructura en boca según explicó José María Grosso. Sobre el único syrah rose degustado, el presidente del centro de enólogos de Alvear se refirió al aroma delicado de las cerezas y frutillas, y el color rojo rubí que presentaba, en tanto que los colores intensos y atractivos, taninos agradables y buena permanencia en boca fue el toque de distinción que caracterizó a los 6 tintos presentados esa noche (bonarda, syrah, malbec, cabernet, tempranillo y un genérico). El comité de degustación les otorgó una calificación de 84 puntos en promedio. Según el especialista Raúl Castellani, la nota estuvo 4 puntos por debajo de lo que merecían, por lo que procedió a realzar aún más la calidad vínica y auguró un excelente porvenir para los vinos jóvenes que se producen en estas latitudes. No obstante, Castellani los instó a trabajar más denodadamente en la comercialización ya que en su parecer, pese a tener en el último tiempo 3 vinos entre los 200 mejores a nivel mundial, la comercialización es lo que falta. Fuente: Diario Los Andes