Se inauguró el jueves pasado a las 19.30, en la avenida Los Robles, del parque General San Martín de Mendoza -frente al Rosedal-, y funciona los fines de semana y feriados. En el lugar microemprendedores de la provincia comercializan productos tan diversos como perfumes, conservas, tejidos, cerámica, artesanías folclóricas tradicionales, elementos producidos a través del reciclado, vinos, chocolates y muchos más. Estuvieron presentes en el acto el Vicegobernador, el ministro de Seguridad, el secretario de Turismo, y la ministra de Desarrollo Humano, Familia y Comunidad, entre otras autoridades. El paseo fue concebido como un centro de apoyo al desarrollo microemprendedor. Su objetivo es contribuir a la inserción laboral y al autoempleo de alrededor de 40 emprendedores mendocinos que ven cristalizadas así, luego de un año de trabajo preparatorio, sus expectativas. De esta manera, comenzaron un ciclo de crecimiento personal, familiar y económico basado en sus habilidades, trabajo y ambiciones de desarrollo. Los microemprendedores se han capacitado en marketing, embalaje, atención al público, creatividad, idiomas y diseño, entre otros rubros, con el fin de mejorar sus productos y habilidades. El Callejón del Lago atiende los fines de semana y feriados en horario vespertino, en la avenida Los Robles, frente al Rosedal del Parque. La novedad de esta propuesta consiste en que estos emprendedores que fueron seleccionados por la calidad de sus productos van a poder comercializar y exponer en este espacio su producción por un año. En ese tiempo van a recibir asistencia y evaluación periódica de sus estrategias de comercialización para hacerlas más efectivas. Una vez superado el plazo fijado, van a dejarles paso a nuevos emprendedores. Se establece entonces un círculo de superación basado en un espacio que provee el Ministerio de Desarrollo Humano, Familia y Comunidad en constante evolución, y que además incluirá a unas 40 familias por año en un proceso de desarrollo humano, social y económico. En ese sentido, Ruggeri afirmó que este proyecto busca asociar el desarrollo socioproductivo de los emprendedores a un recorrido turístico en un lugar muy concurrido, simbólico y representativo de nuestra geografía. También comentó que allí se desarrollarán actividades culturales que le den vida y atractivo al paseo. La idea es que esto se convierta en una actividad que les permita a los permisionarios generar ingresos genuinos para ellos y sus familias. Pretendemos que logren en el proceso la sustentabilidad empresarial para que se mantengan en el tiempo y que con esto les alcance para acceder a condiciones de vida que se merecen, porque son trabajadores, porque son creadores e innovadores, y porque han aceptado el desafío de este emprendimiento colectivo -agregó la funcionaria. Al respecto, Juana, una emprendedora dedicada a la recuperación de técnicas cerámicas aborígenes, expresó que la incorporación a las actividades realizadas por el ministerio fue luego de un proceso de selección y capacitación en distintas disciplinas que nos fueron dando los técnicos de la Dirección de Desarrollo Socioproductivo. Esto me llevó a pensar en cómo mejorar mi producto a nivel de presentación, packaging y promoción, de forma de revalorizarlo y que me permita vivir de lo que sé hacer. También hay lugar en el paseo para los stands del Mercado Artesanal de Mendoza y otros dedicados a instituciones, como el Ministerio de Seguridad y la Fundación Esperanza, que trabaja con papel reciclado. Esto es la concreción de un sueño que busca que a nuestros microemprendedores les vaya mejor, para que en el futuro puedan ser absolutamente independientes y desarrollar una actividad económica digna que contribuya al mejoramiento de su calidad de vida basada en la economía social, que es una economía basada más que en el capital en el trabajo, el esfuerzo y la voluntad de cambio-concluyó Ruggeri.