Al oler una copa de vino cada uno de nosotros realiza una apreciación personal de las distintas percepciones que tiene frente a la copa. Esa percepción junto con la memoria y/o experiencia de cada persona se transforma en una sensación. Una forma de poder transmitir estas sensaciones es mediante un análisis descriptivo. Sin embargo, no es simple el uso de los términos descriptivos y específicos de los atributos el vino.
De allí que uno debe, en primer término, observar el color del vino para establecer si tiene o no-limpidez ó vivacidad; hacer girar la copa para que se liberen los aromas y descubrirlos con el olfato y tomar una pequeña dosis de vino y dejarla un tiempo en la boca para encontrar los sabores.
El vino debe ser colocado en la copa en cantidad inferior a la mitad de su capacidad total, a los efectos de permitir el movimiento circular y lograr la liberación de los aromas.
Es necesario tener en cuenta, además que la temperatura ideal para los vinos es de 16 a 18 grados para los tintos y de 5 a 8 grados para los blancos.
SENTIR EL VINO
Los vinos difieren entre sí en color, textura, grado y cuerpo, así como en olor ó sabor. El catador lo tiene todo en cuenta, y su actuación queda ilustrada en los pasos siguientes:
Un color acusado y fresco: El color en el borde de la copa inclinada y ante un fondo blanco da el primer dato.¿Es límpido? ¿ Es de rojo púrpura (joven) ó tira a ladrillo con la edad?.
El aroma un referente decisivo: El catador inhala profundamente. La primera impresión es la más indicativa. ¿Hay algún color extraño? Huele a uvas frescas o tiene un «bouquet» complejo debido a su estancia en barril ó botella.
El sabor confirmado el aroma: Un buen sorbo, no-uno pequeño, dejando que el vino bañe todos los rincones de la boca. El cuerpo del vino ejerce su impacto. ¿Es generoso o débil? ¿Es áspero debido al tanino como deben ser los tintos jóvenes?.
La persistencia del sabor: Reteniendo el vino en la boca el catador absorbe aire entre sus labios. El calor de la boca lo volatiza y una impresión más positiva se neutraliza en la parte posterior de la boca al ascender los vapores hacia la cavidad visual. Después de tragar ó escupir el vino ¿El sabor persiste o no?.