Potrerillos fue una vez más el escenario de la Oktoberfest, la fiesta de la cerveza que nació en Alemania y hoy se celebra en distintas partes del mundo. El domingo 7 de octubre la tradicional cervecería Jerome de El Salto abrió sus puertas a mendocinos y turistas amantes de la buena música y de la buena cerveza. Bandas en vivo tocaron en los jardines con vistas al imponente Cordón del Plata. Actuaron este año El Manifiesto de los Vientos, con Walter Casciani y cinco saxofonistas en escena; La Oeste 33, La Bolivian y Nick and The Shots. Acorde con el origen de la fiesta, la propuesta gastronómica incluyó platos originarios de la campiña austro-alemana, como el chucrut y variedades de salchichas, así como postres alemanes y tortas artesanales de la zona. La bebida: cerveza en distintas variedades, desde roja hasta negra pasando por la suave, rubia, o diablo. A pesar del frío, hubo mucha cerveza y mucha onda en la Fiesta de la Montaña. Además se obsequiaron tragos a base de cerveza caliente que ayudaron a «calentar» cuerpos y espíritus. Buenos quesos y fiambres, junto con las infaltables salchichas con chucrut, acompañaron muy bien a las distintas variedades de la cerveza artesanal. La propuesta de los organizadores fue acudir con vestimentas informales y llamativas, accesorios raros, sombreros, pelucas y anteojos. La consigna fue vestite del color de la cerveza que más te guste. Como en todas las celebraciones hubo control de alcoholemia y en cada grupo se designó a un conductor para el regreso, quien recibió un voucher con descuento especial en la consumición de cerveza para otro día. A la tradicional movida de la montaña se sumó este año el pub de calle Arístides Villanueva de Mendoza, con fiesta cervecera entre el jueves 4 y el domingo 7.
