Formada por los departamentos Luján de Cuyo y Maipú y varios distritos de Guaymallén, Las Heras y Godoy Cruz, esta región reúne en sus más de 25.000 hectáreas, regadas por el Río Mendoza, las características de suelo y clima que los primeros vitivinicultores apreciaron, ya que aquí se afincaron muchas de las tradiciones familias bodegueras.
Está ubicado en el piedemonte y se extiende desde los 1.060 metros a los 650 metros de altitud. La temperatura media anual es de 15º C y la marcada amplitud térmica es uno de los rasgos que otorgan personalidad a las variedades mejor adaptadas a la región: Malbec, Cabernet Sauvignon, Tempranillo, Bonarda, Syrah y Sangiovese ( entre los tintos).
Entre las variedades blancas se destacan Chardonnay y Semillón. Este último, es uno de los cepajes más tradicionales de la vitivinicultura argentina y se adapta muy bien a las regiones más elevadas, de la margen derecha del Río Mendoza; produciendo un vino de gran calidad, apto para envejecer.
Por su cercanía a la Ciudad de Mendoza, sufre el impacto de la urbanización y este avance va en detrimento a la producción vitivinícola.
La zona además es una de las principales áreas olivícolas del país.